MEXCIO.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo explicó durante su conferencia matutina los motivos detrás de la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en Santa Lucía, destacando que se trató de una decisión basada en criterios técnicos y de seguridad, no políticos.
Sheinbaum recordó que en 2014, bajo el gobierno de Enrique Peña Nieto, la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes advirtió que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) presentaba una saturación crítica en horarios específicos. Esto dio pie a la propuesta del Nuevo Aeropuerto en Texcoco, cuyo costo estimado superaba los 300 mil millones de pesos.
Sin embargo, al asumir la presidencia, Andrés Manuel López Obrador realizó una consulta pública sobre el futuro del proyecto y la mayoría optó por Santa Lucía. “No fue sólo una decisión del pueblo —aclaró Sheinbaum—, también fue una resolución sustentada en la inviabilidad técnica de Texcoco, debido a hundimientos y porque era el único punto de desalojo de aguas de lluvia del Valle de México”.
La mandataria explicó que el decreto emitido en 2023, que trasladó las operaciones de carga al AIFA, se basó en informes técnicos de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), los cuales advertían riesgos de seguridad si se mantenía la concentración de vuelos en el AICM.
“Anular el decreto de 2023 traería nuevamente problemas de seguridad al aeropuerto capitalino”, enfatizó. Añadió que el gobierno mexicano mantiene comunicación directa con el Departamento de Estado y el Departamento de Transporte de Estados Unidos para alcanzar acuerdos bilaterales sobre las operaciones aéreas entre ambos países.
Sheinbaum adelantó que este jueves sostendrá una reunión con representantes de tres aerolíneas nacionales, con el objetivo de ajustar rutas y coordinar operaciones conjuntas que garanticen la eficiencia de la red aeroportuaria mexicana.
